¿Permites que la abundancia sea parte de tu vida?

El camino de la abundancia está relacionado con nuestras emociones, bloqueos y pensamientos. El dinero es solo una parte del “sentir” de abundancia, y muchos buscan el dinero como único eslabón de felicidad.

Pero la abundancia es un “estado del ser” es una manera de relacionarnos con las cosas y con los seres que nos rodean.

Ser abundante requiere, como primera cosa, confiar en nosotras, en nuestros talentos, valores y esfuerzos.

Requiere también, la maravillosa sensación de “merecimiento” y la erradicación de la culpa como castigo y limitación.

Vivir en la abundancia tiene como real dimensión el equilibrio interno, la nueva mirada de estos tiempos a lo humano, a mis potencialidades, a mis propósitos espirituales.

Alguna vez, un gran mentor financiero me dijo: 

¿Qué te gusta hacer?

¿Para qué eres buena?

¿Con qué puedes transformar el mundo y ayudar al planeta?

Cuando fui respondiendo estas preguntas, me di cuenta, que mis gustos variados me llevaban a un espacio de integralidad del ser, de mayor potencial. Amo conversar, amo la musica, amo cantar, amo la naturaleza, las plantas, la tierra, amo ayudar, amo estar en familia, amo comer!!!... y así, tantas y tantas cosas que me gustan.

Y el factor de “hacer las cosas bien” se relacionaba con este amor por lo que me gusta hacer…

Por último, la pregunta de cómo transformo el mundo le dió la dimensión de generosidad y servicio, y pude darme cuenta que absolutamente todo lo que un ser humano haga, puede transformar a un otro. Si soy gerente de una empresa, mi buen trato y empatía transforman mi relación con mis empleados, si soy maestra, el amor por enseñar, la idea de ser una mujer digna de imitar, la bondad y el sentido de respeto y libertad individual pueden transformar a mis alumnos… si hago manicure mi sentido de belleza y perfección pueden ser un regalo para las manos de mis clientas.... podría dar tantos ejemplos, y en todos ellos el concepto de abundancia se manifiesta en amor por lo que hago, transformación y generosidad, y al final, en equilibrio interno.

La abundancia me lleva a un trabajo profundo e íntegro con mi alma, debo comprender la abundancia en todos los campos de mi ser, ¿soy abundante en amor?, ¿soy abundante en belleza?, ¿soy abundante en dinero y materialidad?, ¿soy abundante en amigos y relaciones sanas?, ¿soy abundante en respeto y empatía? 

Mi loba amada, sé que puedes ser una de las muchas mujeres que se sienten estancadas en algún área de su vida. El equilibrio que todas soñamos llega con trabajo y determinación, y desbloquear el concepto de carencia es lo primero. Muchas veces, nuestros bloqueos vienen de nuestras relaciones en la infancia. ¿Qué nos dijeron nuestros padres?, ¿Cómo nos permitieron la libertad de expresar nuestros gustos y pasiones?, ¿Qué sentido de respeto a los demás, al planeta y sus recursos fuimos recibiendo mientras crecíamos?

Todo, todo se relaciona con la abundancia, comienza a mirar tus miedos a la carencia, tu sensación de merecimiento, tu trato con los demás, tu vinculación al dinero y a lo material.

Creo absolutamente que vivimos en un planeta soñado, abundante y mágico, que me provee de todo lo que necesito, que la abundancia es un estado que respiro, que me hace estar abierta a la vida, que me da más confianza en mí y en los demás, y que me hace amar y recibir amor de la misma manera en que sueño recibir dinero, ese dinero que solo es un vehículo para alcanzar el real objetivo de esta vida, poder llenarme de experiencias y darle a mi alma, el sentido material y divino que tiene nuestra encarnación. Vivir, vivir y vivir intensamente!!!!

Recuerda que puedes comenzar un trabajo individual de desbloqueo y crecimiento interior que te lleve a tu mayor potencial de abundancia con el curso “Sanando los bloqueos emocionales” como también, con mi terapia de “Reconexión espiritual.”

Te dejo el Tratamiento de 21 días de Merecimiento de Loius Hay, texto imprescindible para trabajar nuestro estado de abundancia.

TRATAMIENTO DE MERECIMIENTO

Yo me merezco todo lo bueno, no algo, un poquito, sino todo lo bueno.

Ahora disuelvo cualquier pensamiento negativo o restrictivo.

Me libero y disuelvo todas las limitaciones del pasado. No me ata ningún miedo ni limitación de la sociedad en la que vivo. Ya no me identifico con ningún tipo de limitación.

En mi mente tengo libertad absoluta. Ahora entro a un nuevo espacio en la conciencia, en donde me veo de forma diferente. Estoy creando nuevos pensamientos acerca de mi ser y de mi vida. Mi nueva forma de pensar se convierte en nuevas experiencias.

Ahora sé y afirmo que formo una unidad con el Próspero Poder del Universo. Y por lo tanto recibo multitud de bienes. La totalidad de las posibilidades está ante mi.

Merezco la vida, una vida buena.

Merezco el amor, abundante amor.

Merezco la salud.

Merezco vivir cómodamente y prosperar.

Merezco la alegría y la felicidad.

Merezco la libertad, la libertad de ser todo lo que puedo ser.

Merezco muchas cosas más que todo eso: merezco todo lo bueno.

El Universo está más que dispuesto a manifestar mis nuevas creencias y yo acepto la abundancia de esta vida con alegría, placer y gratitud. Porque me lo merezco, lo acepto y sé que es verdad. Así Es. 

Gracias Amado Universo